viernes, 29 de enero de 2016

21:45 de la noche, tráfico desesperante, siento un hormigueo en la mano derecha, he sostenido el volante con tanta fuerza, durante tanto tiempo, llevo tal vez 2 horas, creo que con esta lentitud estaré llegando a mi casa en una hora más. Tuve un largo día de trabajo, precedido de una cansada rutina matutina de ejercicio que inició a las 7:10 de la mañana, lo cual significa que llegué tarde a mi clase de body combat, desperté 15 minutos después de las 5:00 am., estoy cansada, quiero que se muevan! qué  avancen! Necesito llegar a mi casa, cenar, alistarme para dormir, dormir.

Debería estar dormida a las 11:00 de la noche, si planeo dormir 6 horas, aunque lo sé son muy pocas horas, alguien que quiere un cuerpo increíble debería dormir al menos 8 horas, mejor si son 9, para que nuestro cuerpo se transforme y se llene de músculos.

11:19 de la noche, mi cabeza toca la almohada y me dispongo a dormir, respiro profundo, intento relajarme, dormir es mi objetivo, pero antes empiezo a pensar en que olvide llamarle a mi sobrino, hoy era su cumpleaños y no lo recordé, además olvide posponer mi cita con el bariatra, al que no podré visitar el sábado que tengo entrenamiento de 20 kilómetros y necesito terminar a las 10:00 am., para estar lista al medio día para la celebración de mi sobrino al que por cierto no felicité.

05:18 Ring♪-ring♪-ringabro los ojos y noto que estoy 18 minutos tarde, debe ser la tercera vez que suena la alarma, así que me alisto rápidamente, me pongo una abrigadora chamarra y pasó por la cocina para sustraer las raciones diarias que deberé de consumir de acuerdo a un plan diario de alimentación proporcionado por mi bariatra, preparo café y lo pongo en mi tumblr, guardo aproximadamente 15 pastillas que deberé tomar a lo largo del día para mantener mi cuerpo saludable, con energía para el entrenamiento.

13:56 me apresuro a comer mi ración de carbohidratos con proteína, es decir una tasa de arroz cocido a medio vapor y salmón con verduras al vapor. Me siento tensa, mientras como rápidamente tecleó una lista de pendientes de la oficina, tengo en mente una escena del día de ayer que me puso feliz, cuando fui a tomar un baño al vestidor del gym, después de mi rutina, ocupé mi lugar favorito para mudarme de ropa, ahí se me acercó una mujer joven y me dijo  -tienes un cuerpo muy bonito- Gracias le contesté. Ya quiero llegar al gym y contarle el episodio a mi coach.

15:45 llevo un rato corriendo como hámster en la máquina, marca 35 minutos en nivel 11 de velocidad, lo que quiere decir que voy a 11 km por hora, sólo necesito 10 minutos más para completar mi carrera del día, en estos momentos, controlo mi respiración, cuido mis pisadas, estoy sudando mucho, me concentro en mi música, aunque no puedo recordar que canción acaba de terminar, en realidad me estoy concentrando en terminar, siento que tengo que parar, pero no lo hago, sigo, me repito voy a terminar, 36 minutos ya sólo faltan 9.

22:30 He terminado de alistarme para dormir, tomo uno de los 2 libros que tengo en mi cabecera, "las recetas de @ sascha fitness", página 20, termino de leerlo pero me doy cuenta que no entendí nada, sólo puedo pensar en mi entrenamiento de mañana, cómo voy a hacer para correr 20km en menos 1.50 horas, qué calzado usaré, cómo voy a calentar, qué haré después, seguro 30 minutos de abdominales, ahora sí haré una serie de las más difíciles, me tocó el abdomen y me siento poderosa, ¡soy tan fuerte!.

02:00 Ring♪-ring♪-ringdespieto, mi teléfono está sonando no lo puedo creer, se terminó la noche, es hora de levantarme, vestirme, calzarme, desayunar, correr, darlo todo, levanto el teléfono y notó que es una llamada, un número que apenas puedo leer porque no me es posible abrir los ojos. Es él! escucho su voz, un poco arrastrada, - cómo estas princesa?- estas borracho! afirmo. No claro que no - me contesta- en ese momento me molesto pienso que ha interrumpido mi sueño y no dormiré lo que necesitaba, ha arruinado mi entrenamiento de mañana. Cuelgo.

2:20  Me despierta la vibración del teléfono, debí apagarlo, pero es él otra vez, yo atiendo enojada -Qué quieres, necesito dormir, tengo que entrenar, déjame en paz! siempre lo mismo contigo- Enseguida contesta –Cálmate, siempre con lo del entrenamiento, "estas obsesionada con el ejercicio". En silencio pienso que, de valer la pena le contestaría, cuántas veces he escuchado lo mismo, en realidad gente como él nunca se molesta en conocerme, si me conocieran, sabrían que mi verdadera obsesión radica en huir de mis pensamientos, no quiero pensar, no quiero recordar, no quiero escucharme, no quiero reconocer que muchas cosas me duelen. 

Sabes qué? No me importa lo que opinas de mí. Cuelgo el teléfono y tomo una decisión, dormiré hasta que ya no tenga sueño, apagaré el teléfono y mi alarma, lo que pasé mañana será una sorpresa.