21:45 de la noche,
tráfico desesperante, siento un hormigueo en la mano derecha, he sostenido el
volante con tanta fuerza, durante tanto tiempo, llevo tal vez 2 horas, creo que
con esta lentitud estaré llegando a mi casa en una hora más. Tuve un largo día de
trabajo, precedido de una cansada rutina matutina de ejercicio que inició a las
7:10 de la mañana, lo cual significa que llegué tarde a mi clase de body
combat, desperté 15 minutos después de las 5:00 am., estoy cansada, quiero que
se muevan! qué avancen! Necesito llegar a mi casa, cenar, alistarme para
dormir, dormir.
Debería estar dormida
a las 11:00 de la noche, si planeo dormir 6 horas, aunque lo sé son muy pocas
horas, alguien que quiere un cuerpo increíble debería dormir al menos 8 horas,
mejor si son 9, para que nuestro cuerpo se transforme y se llene de músculos.
11:19 de la noche, mi
cabeza toca la almohada y me dispongo a dormir, respiro profundo, intento
relajarme, dormir es mi objetivo, pero antes empiezo a pensar en que olvide
llamarle a mi sobrino, hoy era su cumpleaños y no lo recordé, además olvide
posponer mi cita con el bariatra, al que no
podré visitar el sábado que tengo entrenamiento de 20 kilómetros y necesito
terminar a las 10:00 am., para estar lista al medio día para la celebración de
mi sobrino al que por cierto no felicité.
05:18 Ring♪-ring♪-ring♪; abro los ojos y noto que estoy 18 minutos tarde, debe
ser la tercera vez que suena la alarma, así que me alisto rápidamente, me pongo
una abrigadora chamarra y pasó por la cocina para sustraer las raciones diarias
que deberé de consumir de acuerdo a un plan diario de alimentación
proporcionado por mi bariatra, preparo café y lo pongo en mi tumblr, guardo aproximadamente 15
pastillas que deberé tomar a lo largo del día para mantener mi cuerpo
saludable, con energía para el entrenamiento.
13:56 me apresuro a comer mi ración de
carbohidratos con proteína, es decir una tasa de arroz cocido a medio vapor y
salmón con verduras al vapor. Me siento tensa, mientras como rápidamente tecleó
una lista de pendientes de la oficina, tengo en mente una escena del día de
ayer que me puso feliz, cuando fui a tomar un baño al vestidor del gym, después
de mi rutina, ocupé mi lugar favorito para mudarme de ropa, ahí se me acercó
una mujer joven y me dijo -tienes un cuerpo muy bonito- Gracias le
contesté. Ya quiero llegar al gym y contarle el episodio a mi coach.
15:45 llevo un rato corriendo como hámster
en la máquina, marca 35 minutos en nivel 11 de velocidad, lo que quiere decir
que voy a 11 km por hora, sólo necesito 10 minutos más para completar mi
carrera del día, en estos momentos, controlo mi respiración, cuido mis pisadas,
estoy sudando mucho, me concentro en mi música, aunque no puedo recordar que
canción acaba de terminar, en realidad me estoy concentrando en terminar,
siento que tengo que parar, pero no lo hago, sigo, me repito voy a terminar, 36
minutos ya sólo faltan 9.
22:30 He terminado de alistarme para
dormir, tomo uno de los 2 libros que tengo en mi cabecera, "las recetas
de @ sascha fitness", página 20, termino
de leerlo pero me doy cuenta que no entendí nada, sólo puedo pensar en mi
entrenamiento de mañana, cómo voy a hacer para correr 20km en menos 1.50 horas,
qué calzado usaré, cómo voy a calentar, qué haré después, seguro 30 minutos de
abdominales, ahora sí haré una serie de las más difíciles, me tocó el abdomen y
me siento poderosa, ¡soy tan fuerte!.
02:00 Ring♪-ring♪-ring♪, despieto, mi teléfono está sonando no lo puedo creer,
se terminó la noche, es hora de levantarme, vestirme, calzarme, desayunar,
correr, darlo todo, levanto el teléfono y notó que es una llamada, un número
que apenas puedo leer porque no me es posible abrir los ojos. Es él! escucho su
voz, un poco arrastrada, - cómo estas princesa?- estas borracho! afirmo. No
claro que no - me contesta- en ese momento me molesto pienso que ha
interrumpido mi sueño y no dormiré lo que necesitaba, ha arruinado mi
entrenamiento de mañana. Cuelgo.
2:20 Me despierta la vibración del
teléfono, debí apagarlo, pero es él otra vez, yo atiendo enojada -Qué quieres,
necesito dormir, tengo que entrenar, déjame en paz! siempre lo mismo contigo- Enseguida
contesta –Cálmate, siempre con lo del entrenamiento, "estas obsesionada
con el ejercicio". En silencio pienso que, de valer la pena le
contestaría, cuántas veces he escuchado lo mismo, en realidad gente como él
nunca se molesta en conocerme, si me conocieran, sabrían que mi verdadera
obsesión radica en huir de mis pensamientos, no quiero pensar, no quiero
recordar, no quiero escucharme, no quiero reconocer que muchas cosas me duelen.
Sabes qué? No me importa lo que opinas de mí.
Cuelgo el teléfono y tomo una decisión, dormiré hasta que ya no tenga sueño, apagaré
el teléfono y mi alarma, lo que pasé mañana será una sorpresa.